Si! Hoy llega! Equinoccio de primavera. El momento del año en el que las horas de luz y la noche entran en equilibrio, y nos recuerda a nosotros, como parte inseparable de la naturaleza que ahora es momento de hacer balance y tomar impulso para ir hacia eso que durante el invierno ha sido un anhelo guardado en nuestro corazón. ¡Ahora toca fuerza y a por ello! Los minutos y horas de sol van a ir ganando terreno, florece el campo, florecemos nosotros!
Pero hay un detalle y es que en primavera, y sobretodo estas primeras semanas de fuerza poca. Un día hace frío, otro calor, la temperatura sube y baja, hay que adaptarse poco a poco a más horas de luz y básicamente esa adaptación al organismo humano le supone una necesidad de regulación de ciertas hormonas: serotonina, endorfinas, melatonina y cortisol sobretodo. Míralo así: Después de una larga hivernación el organismo poco a poco se despierta y ese despertar no es inmediato, vamos emergiendo poco a poco.
Para adaptarnos a la primavera contamos con varios elementos dentro de la medicina natural que nos ayudan. En este post os hablaré de dos de ellos. El primero, el hongo Cordiceps (cordyceps cinensis) que según la Medicina China lo que hace es tonificar el «Qi», la energía vital que reside en los riñones. Su principal activo es la adenina, que además de proporcionar energía y vitalidad es un neuromodulador del sistema nervioso central. Tomar Cordiceps en primavera nos aporta energía vital y una dosis extra de antioxidantes.
El siguiente elemento que recomiendo: Las algas de agua dulce y especialmente la Chlorella, reconocida como la mayor fuente de clorofila. Esta sustancia verde protagoniza la fotosíntesis en las plantas y en el organismo humano oxigena sangre, alcaliniza y estimula la regeneración celular, siendo un gran antioxidante. De hecho la clorofila tiene afinidad con la sangre humana, su composición es muy similar, así ayuda a renovar la sangre en primavera. Al ser rico en vitaminas, minerales y aminoácidos actúa estimulando el organismo, haciendo así frente al cansancio propio de la astenia primaveral. Se aconseja tomarla en dosis de entre 3-6 gramos al día.
Con estos dos elementos seguro que la astenia no te afecta y te recargas de pilas para disfrutar de esas horas extras de sol y de la explosión de vida y color en primavera.